Castillo nació en 1936 en Quetzaltenango y desde muy temprano se involucró con la militancia estudiantil y revolucionaria, lo que lo obligó a exilarse con apenas 18 años de edad, donde trabajó como vendedor de libros.
A los 19 años gana el Premio Centro Americano de poesía. Su poesía era marcada por la aflicción del pueblo, condiciones sociales y la nostalgia de su patria
El tiempo de exilio en El Salvador fue marcado por una intensa activad literaria y política.
En 1957 Castillo volvió a Guatemala tras la muerte del dictador Castillo Armas. Estudió Derecho en Guatemala, letras y cine en Alemania.
Tras estudiar en Alemania volvió a Guatemala en 1964 y siguió con la militancia al compartir las actividades de la lucha armada, por ese hecho fue arrestado y enviado nuevamente al exilio.
Las organizaciones revolucionarias de Guatemala lo nombran representante del país en el comité Organizador del Festival Mundial de la Juventud.
En 1966 volvió a su país para juntarse a las Fuerzas Armadas Rebeldes(FAR) y luchar contra la oligarquía instalada en Guatemala siendo luego capturado por los militares.
Castillo es llevado a la ciudad de Zacapa, donde es torturado y mutilado. Fue quemado vivo junto a su compañera Nora y protagonizó una de las escenas más terribles de tortura. Murió a los 31 años de edad.
El presidente de Guatemala, Álvaro Colom, pidió perdón a la familia del poeta guatemalteco por su asesinato en una ceremonia realizada en el Palacio Nacional. Colom lamentó e los daños ocasionados a su familia y a las letras del país.
Compañeros mios
yo cumplo mi papel
luchando
con lo mejor que tengo.
Qué lástima que tuviera
vida tan pequeña,
para tragedia tan grande
y para tanto trabajo.
No me apena dejaros.
Con vosotros queda mi esperanza.
Sabéis,
me hubiera gustado
llegar hasta el final
de todos estos ajetreos
con vosotros,
en medio de júbilo
tan alto.
Lo imagino
y no quisiera marcharme.
Pero lo sé, oscuramente
me lo dice la sangre
con su tímida voz,
que muy pronto
quedaré viudo del mundo.